En los últimos años, muchas casas han optado por reservar un espacio en la sala para acondicionar un pequeño bar.

No solo para alojar botellas sino también para resguardar las copas o la cristalería. Si es tu caso, podrías inclinarte por una barra o taburete de estilo industrial con acabados de metal, madera envejecida y detalles de cuero. Es una onda que recoge mucho de la estética urbana con toques modernos. También podrías emplear estantes flotantes, cajas decorativas y hasta uno de esos carritos de bar para lucir tu colección. En este rincón, la iluminación cobra protagonismo: luces empotradas en el techo, tiras LED en los estantes o lámparas de mesa regulables.